Pasta integral de espelta con pollo, calabacín y cúrcuma

La espelta empezó a cultivarse en Irán hace mas de 7.000 años. Con la mecanización agrícola se abrió camino al trigo quedando está mas apartada.  La dificultad para trabajar el grano hace que su precio sea mayor, pero sus beneficios también lo son frente a otros cereales. 
Gran fuente de de energía, rica en vitaminas y minerales, a destacar las del complejo B que tan importantes son para el sistema nervioso. También son una fuente importante en fibra, lo que facilita su digestión.

La espelta, un aliado perfecto para nuestro organismo. 

La espelta tiene un valor nutricional superior al trigo ya que no ha sufrido tantas modificaciones genéticas como este, por lo que mantiene muchas de sus características originales.
La espelta tiene un poco mas de proteínas que el trigo, contiene 8 aminoácidos necesarios para nuestro organismo, aminoácidos que el cuerpo no es capaz de producir, además, estas proteínas contienen gran cantidad de un aminoácido llamado lisina.

La espelta es un gran aliado para nuestra salud ya que tiene una gran riqueza nutricional,  ayudando de forma muy natural el correcto funcionamiento del sistem cardiovascular, inmunitario, nervioso y óseo.
Además de todo esto, la espelta es mas respetuosa con el medio ambiente que el trigo ya que al mantener su casco exterior soporta climas mas difíciles y es mas resistente a enfermedades lo que hace que no sea necesario usar  herbicida o pesticidas.

Seguro que después de leer toda esta información, la próxima vez que vayáis a comprar pasta lo tendréis en cuenta, por vuestra salud y además, porque esta pasta está muy buena.
Ahora sí, os dejo la lista de ingredientes necesario y la receta paso a paso.
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Ingredientes para 2 personas:

• 2 dientes de ajo
• 2 vasos de pasta integral de espelta 
• 1/2 cebolla
• 1 calabacín
• 200 gr de carne picada de pollo
• 150 gr de nata fresca
• un poco de leche
• 1 cucharadita de cúrcuma
• un poco de sal
• aceite de oliva virgen extra

Elaboración:

1. Picamos los dientes de ajo, la cebolla y el calabacín. Sofreímos en una sartén con un poco de aceite de oliva virgen extra.
2. Cuando la cebolla esté transparente incorporamos el calabacín. Si ponemos una tapadera a la sartén, el calabacín se cuece al vapor y se hace mucho mas rápido.
3. Cocemos la pasta en abundante agua hirviendo con un poco de orégano, el tiempo indicado por el fabricante. 
4. Una vez hecho el calabacín  añadimos la carne picada, removemos y volvemos a tapar la sartén. Cuando la carne esté cocinada añadimos una cucharadita de cúrcuma y un poco de sal. 
5. Mezclamos la nada fresca con un poco de leche, vertemos la mezcla al sofrito removemos y dejamos cocinar a fuego suave unos 10 minutos .
6. Por último mezclamos la pasta con el sofrito y listo. A disfrutar de un sabroso plato.